No es broma.
La Universidad de Roskilde -sí, el mismo lugar del festival- estudia cerebros de mosquitos para compararlos con el cerebro humano y el desarrollo del cuerpo durante la pubertad.
Los mosquitos, ya sabemos (y si no, se los cuento ahora) no tienen testiculos ni ovarios, sin embargo su cerebro segrega las mismas hormonas que los humanos durante su desarollo. El cerebro del mosquito y del humano son simirales en cuanto a estructura.
O sea somos (y tenemos) un cebero de mosquito mejorado.
Cambiando de canal, me encontré con esta frase que se quedó en algun lugar de mi cerebro (de mosquito).
Livet er verken ikke noe man har eller eier, livet er bare noe som passerer forbi.